*Solo tiene el nombre del ex gobernador
*Farías fue quien pagó esta obra de Bernardo Luis
*Se espera que la gobernadora Rocio Nahle cambie la placa
Pedro Muñoz Zamudio/ NOTIVER
El estadio Luis “Pirata” Fuente hoy sábado 17 de mayo del 2025 inicia una nueva era, una nueva historia, se reabre completamente remodelado, pero con un “detallito” que no podemos dejar pasar, una situación que en la recta final del anterior Gobernador Cuitláhuac Jiménez aprovecharon para hacer un reconocimiento INMERECIDO para Jiménez García en este inmueble, Catedral del futbol en toda la entidad veracruzana.
Cuitláhuac prometió que la estatua del “Pirata” Fuente que fue donada a título gratuito en el 2022 por el comité denominado “Alma de Pirata” encabezado por el Maestro Gilberto Farías Morales, que en Paz Descanse, se pondría en la entrada principal y se cumplió, lo que no estuvo bien es haber colocado otra placa que non fue la original, donde ya no se toma en cuenta el nombre del Maestro Gilberto Farías quien fue el personaje que PAGO esta estatua que fue realizada por el reconocido escultor poblano Bernardo Luis.

Farías Morales formó un Comité llamado “Alma de Pirata”
Cuando fue debelada la estatua del “Pirata” Fuente se colocó una placa donde aparecía el nombre de quien encabezaba este comité donde estaba el nombre de Antonio de la Fuente Varela , hijo del “Pirata” y que siempre buscó la manera que el mejor futbolista veracruzano de toda la historia, tuviera en el estadio que lleva su nombre una estatua y fue el abogado Gilberto quien apoyó esta idea hasta que lo logró pagando con sus propios medios dicha escultura que mide más de 6 metros de altura.
En la placa original estaba todo el Comité, así como el nombre del Gobernador en turno Cuitláhuac García ya que la obra fue donada a título gratuito al Gobierno del Estado para evitar en el futuro cualquier problema, también aparecía el nombre de Fidel Kuri Grajales como presidente de los Tiburones Rojos, esto por capricho del mismo Fidel quien se encargó de condicionar a su manera la colocación de la estatua que tampoco le costó un solo peso, pero con el pretexto que era el arrendatario “casi dueño” del estadio puso muchas trabas pero al final cuenta cantidad de dinero a cambio de un palco, pagado por Gilberto, lo solucionó todo a 3 días de la develación.
Sería justo que al menos, en una nueva placa en la estatua, se plasme al Maestro Gilberto Farías Morales quien no descansó hasta lograrlo, así como la del buen Antonio de la Fuente Varela que aunque no la vio la de pié, se fue sabiendo que por fin se le haría justicia a su señor padre.
Darle todo el crédito al ex gobernador Cuitláhuac García por la estatua es lamentable y poco ético, porque la historia dice otra cosa y ojalá la Gobernadora Rocío Nahle lo tome en cuenta y repare este error.