PLANEACIÓN ESTRATÉGICA
Por: Maestro Rafael Belmonte Olivares/ Notiver
“QUIEN NO HACE PLANES PARA TRIUNFAR ESTÁ HACIENDO PLANES PARA FRACASAR”
Está terminando la temporada acuática 2023-2024, la próxima semana se cierra con el Nacional de Curso Largo 2024 que se realizará en el Centro Acuático “Leyes de Reforma” de Boca del Río.
Termina un año deportivo, pero, todavía no conocemos el plan para la nueva temporada y mucho menos el plan para el ciclo olímpico.
Tenemos nuevos dirigentes en los ámbitos nacionales, estatales y pronto también municipales.
Una vez más surge la pregunta; ¿Qué es primero el plan y luego el hombre? O ¿el hombre y luego el plan?
En la administración tenemos las dos opciones, 1º hacer el plan de trabajo y luego elegir al dirigente que lleve a cabo el plan y 2º.
Designar al funcionario y que este haga el plan de trabajo.
Ambas se llevan a cabo.
Uno de las debilidades de la administración pública y también la deportiva es la falta de una adecuada planeación estratégica.
Los dirigentes deben conocer primero cuáles son sus metas y objetivos, establecer sus prioridades y luego empezar a proyectar como lograrán obtener los resultados que pretenden.
La improvisación como recurso es buena, como sistema es bastante mala.
La planeación debe considerar la curva de crecimiento, un buen líder debe saber esto y hacer los cambios antes de que su trabajo empiece a declinar, es decir los cambios deben realizarse a tiempo, pero para ello debe haber un seguimiento del desarrollo de su plan, cuando los cambios son frecuentes se produce un estado de inestabilidad e inicia el caos, para evitar este hay que anticiparse a los cambios.
Toda la organización debe estar preparada para el tiempo del caos durante el proceso de planeación, siempre hay que tomar en cuenta que habrá obstáculos en el camino, de todo tipo sobre todo financieros, de las instalaciones, de recursos técnicos, etc.
Los dirigentes, los líderes, deben estar constantemente planeando, haciendo el seguimiento y evaluando para que los cambios sean saludables.
La información es parte vital en la planeación, antes de pedir a los afiliados o integrantes de la organización hay que informar oportunamente.
Hay que comunicar y clarificar, hay que compartir la visión de la organización y la misión que se han fijado.
Las metas deben ser concretas y deben tener su línea de tiempo, lo que algunos llaman calendarización.
Lo malo es que muchas organizaciones consideran que haciendo un calendario de sus actividades es el plan, craso error.
La falta de transparencia en el manejo de los recursos financieros, de equipo, humanos y de resultados son el principio del caos.
Esta es una de las debilidades de nuestra administración deportiva, es por eso que vemos tantas demandas judiciales y deportivas y parece que es un cuento que nunca acabará.
La parte final de una planeación estratégica es el inicio de un nuevo plan.
La evaluación no solo es hacer reconocimientos, elogios e índices de los apoyos para los que lograron las metas, sino el estudiar cuales fueron las fortalezas y debilidades para así concebir un nuevo plan, aún mejor.
“UNA META SIN UN PLAN, ES SIMPLEMENTE UN DESEO” (Antoine de Saint Exupery)
¿Ya estamos En sus marcas para alcanzar nuestras metas?
