Texto y fotos Héctor Bócker Cortés / NOTIVER
Con gran entusiasmo y un ambiente de mucha cercanía, el apreciado Fernando Marín celebró un año más de vida en una amena comida que tuvo como escenario el elegante salón de eventos, punto de reunión de familiares y amistades que no quisieron perderse la ocasión para felicitarlo y desearle lo mejor.
A su lado, como siempre, estuvo su querida esposa Cecilia Luna de Marín, quien lo acompañó con el cariño y la complicidad que los distinguen como pareja.
También se contó con la presencia de su hijo Fernando, así como de su hija Elo, quien acudió con su esposo Beto Lara y sus pequeños hijos Betito y JuanFer, que con su simpatía y ocurrencias iluminaron la velada.
Aunque por compromisos laborales su hijo Cecilín no pudo estar presente físicamente, se hizo sentir de manera especial a través de un mensaje lleno de afecto que conmovió profundamente a su papá, recordando el lazo entrañable que los une.
La reunión se caracterizó por su ambiente cálido y festivo.
Los invitados disfrutaron de una exquisita comida y brindaron por la salud, la alegría y los éxitos de Fernando, quien recibió numerosas muestras de cariño, bendiciones y hermosos obsequios que reflejaron el aprecio que todos le tienen.
Entre risas, anécdotas y felicitaciones, el festejado se mostró profundamente agradecido por las atenciones y por el gran cariño que lo rodea.
El evento, sencillo en su esencia pero elegante en su desarrollo, se convirtió en un momento inolvidable que fortaleció los lazos familiares y de amistad.
Sin duda, el cumpleaños de Fernando Marín fue una ocasión para celebrar la vida, la unión y el privilegio de contar con seres queridos que hacen de cada instante un recuerdo invaluable.
