Por Noemí Valdez
Reportera de Notiver
El Órgano de Fiscalización Superior (ORFIS) de Veracruz, a cargo de la auditora general Delia González Cobos, alertó que al menos tres alcaldes de la zona norte que buscan utilizar las inundaciones de la depresión tropical 90E, registradas en octubre, para justificar la mala calidad o la falta de conclusión de obras municipales.
González Cobos señaló que, de los 38 municipios que reportaron daños por la contingencia, ya se han identificado casos donde las autoridades pretenden atribuir la deficiencia de las construcciones a los fenómenos meteorológicos.
"Ya sabemos quiénes tienen malas intenciones, pero los identificamos fácilmente", sentenció la Auditora General.
La titular del ORFIS fue enfática al afirmar que no se dejarán sorprender, pues la dependencia cuenta con información previa a las lluvias.
Recordó que el organismo ya había recibido los informes y el avance de obras de los municipios de la zona norte antes del evento de octubre.
"Hay información que nos llega, hay información preliminar de los avances que recibimos de manera trimestral en nuestras plataformas. Con esa información vamos a emitir el pronunciamiento que corresponda", explicó González Cobos.
Esta base de datos incluye los reportes trimestrales de obra pública, con grabaciones y fotografías del avance, lo que dificultará cualquier argumento basado en el impacto de las inundaciones.
La auditora confirmó que, aunque aún no inician la revisión formal de los daños, ya existen reportes y quejas ciudadanas provenientes de los municipios afectados.
Los residentes han señalado que obras que estaban incompletas o que presentaban una calidad inadecuada están siendo ahora excusadas con las afectaciones de las lluvias.
"Tenemos como dos o tres casos de obras del norte, de caminos y carretera. Tenemos un avance de obras que nos es reportado cada tres meses, y ahí verificamos porque nos hacen llegar grabaciones y fotografías del avance", detalló la funcionaria, garantizando que, si bien se considerarán los daños legítimos generados por la contingencia, la fiscalización será rigurosa.