Por Noemí Valdez
eportera de Notiver
La propuesta de Lisbeth Aurelia Jiménez Aguirre para la Fiscalía General del Estado (FGE), enviada por la gobernadora Rocío Nahle, generó posiciones encontradas en las bancadas del Partido Acción Nacional (PAN), y de Movimiento Ciudadano (MC) en el Congreso Local.
Indira Rosales San Román del albiazul votó en contra mientras que Fernando Yunes quien dio “el beneficio de la duda” votó en abstención junto con Alicia Delfín; en MC Elena Cordoba también se opuso, mientras Adrián Ávila votó a favor.
Al hacer uso de la voz, la diputada Elena Cordoba de Movimiento Ciudadano (MC) dijo que como lo advirtieron, Morena y aliados están usando reformas para designar a la nueva titular de la FGE mediante un proceso “hecho a modo” por lo que el proceso es un “cheque en blanco” a la gobernadora en turno.
“Nuestra postura es contra el método pues no puede haber autonomía real pues la ruta es que el ejecutivo propone y el congreso obedece, si no existe un método de evaluación transparente, entonces, estamos instalando una fiscalía que se entrega como un cheque en blanco al ejecutivo”.
Además enlistó una serie de irregularidades como persecusión de opositores, carpetas “congeladas”, feminicidios sin resolver, colectivos ignorados y una fiscalía con la confianza ciudadana quebrada.
En el mismo sentido se pronunció el diputado Héctor Yunes Landa, quien recordó que MORENA anteriormente se oponía a un “fiscal carnal”, sin embargo ahora la incongruencia los alcanza.
De Lisbeth Aurelia Jiménez Aguirre, dijo que no cumple con el perfil y además de que se convertirá en una integrante más del gabinete.
En el mismo sentido, exigió que previo a que rindiera protesta hiciera público el resultado de su examen de Control y Confianza mismo que presentó en el mes de abril.
Al calificar esto como un “atraco navideño” acusó a la futura fiscal de haber “vendido” sentencias a traves de su secretario particular David Cardeña quien tiene al menos tres carpetas de investigación; y de haber dejado en los últimos lugares al Poder Judicial de Veracruz; a esto se suma que dejó más de 5 mil 400 presos en prisión preventiva superando los dos años violando la presunción de inocencia.
Indira Rosales San Román diputada del Partido Acción Nacional (PAN), remarcó que una vez más el Congreso se convirtió en una oficialía de partes y le advirtió que será vigilada en su nueva encomienda pues ahora “la gobernadora ya no podrá decir que desconoce el avance de las investigaciones porque a partir de ahora será una integrante del gabinete pues será su jefe directamente y tendrá el poder de destituirla”.
Fernando Yunes – también de la bancada panista- celebró la salida de Verónica Hernández Giaddans, pero reiteró que la gobernadora ahora será co-rresponsable de los resultados de la FGE; al mismo tiempo dijo que no juzgaría el perfil de Aurelia Jiménez pero es la nueva funcionaria es quien debe dar resultados y de manera personal le dio “el beneficio de la duda” por lo que le pidió retormar la institucionalidad del organismo.
Además le remarcó que la historia la juzgará por lo que le pidió abstenerse de hacer actos de persecusión política.
“Acompaño el nombramiento. Mis votos son para que de resultados (…) sería injusto de mi parte poner una cuestión personal o política. Le deseo todo el éxito”.