*María Corina Machado es la galardonada esta madrugada
(Agencias).- El Comité Nobel noruego, un panel compuesto por cinco miembros designados por el Parlamento, ha otorgado este viernes el Nobel de la Paz a la opositora venezolana María Corina Machado.
El comité la ha elegido por “por su incansable trabajo promoviendo los derechos democráticos para el pueblo de Venezuela y por su lucha por lograr una transición justa y pacífica de la dictadura a la democracia”.
“Como líder del movimiento democrático en Venezuela, María Corina Machado es uno de los ejemplos más extraordinarios de coraje civil en América Latina en los últimos tiempos”, asegura el comité en su designación.
“Machado ha sido una figura clave y unificadora en una oposición política que alguna vez estuvo profundamente dividida, una oposición que encontró un terreno común en la demanda de elecciones libres y un gobierno representativo”, asegura en su designación.
El comité es desde 1901 el órgano encargado de designar a la persona que considera que cumple con los criterios del fundador del premio.
El deseo de Nobel, explícitamente recogido en su testamento, enumera los puntos claves que se buscan en el perfil del candidato más merecedor: “[…] la persona que más o mejor haya contribuido a fomentar la hermandad entre las naciones, la abolición o reducción de los ejércitos permanentes, y el establecimiento y la promoción de congresos de paz”.
El Premio Nobel de la Paz, último de los cinco galardones que Alfred Nobel señaló en su testamento —las demás categorías incluyen Medicina o Fisiología, Física, Química y Literatura— se falla en el aniversario de la muerte de Alfred Nobel, el 10 de octubre, después del resto de premios ya anunciados a lo largo de esta semana.
En 2024, el galardón recayó en Nihon Hidankyo, organización nacional japonesa de supervivientes de la bomba atómica de Hiroshima y Nagasaki, conocidos como los hibakusha, “por sus esfuerzos para lograr un mundo libre de armas nucleares y por demostrar mediante el testimonio de testigos que las armas nucleares no deben volver a utilizarse nunca”, en palabras del entonces presidente del comité, Jorgen Watne Frydnes.