AY NANITAS
*Sefiplan contra empresarios
Por Noemí Valdez
Reportera de Notiver
En un contexto económico donde el sector empresarial veracruzano aún lucha por consolidar su recuperación, la Secretaría de Finanzas y Planeación (SEFIPLAN) ha optado por endurecer su postura.
A través de notificaciones masivas, la dependencia estatal ha comenzado a enviar "avisos" que simulando una invitación al cumplimiento, esconden una clara amenaza de sanciones económicas y multas contra los generadores de empleo.
Editor86
Entre los cobros está el Impuesto sobre Erogaciones al Trabajo Personal (mejor conocido como el Impuesto a la Nómina).
Basándose en el artículo 98 del Código Financiero del Estado, la SEFIPLAN está rastreando omisiones administrativas que datan incluso de inicios de 2023.
Empresarios locales han denunciado que la autoridad fiscal parece más interesada en la recaudación punitiva que en facilitar el crecimiento económico.
Las cartas enviadas a personas físicas y morales detallan meses de presuntos adeudos —en algunos casos abarcando todo el ejercicio 2023— y advierten de inmediato sobre: Actualizaciones y recargos por pagos extemporáneos.
Multas directas por la omisión en el cumplimiento de la obligación.
A pesar de que el texto de la Secretaría asegura que el contribuyente tiene derecho a ser tratado con "respeto y consideración", la realidad percibida es distinta.
Para muchos dueños de negocios, el envío de estos requerimientos con fechas de corte recientes (diciembre de 2025) representa un "garrote fiscal" en una temporada donde las empresas enfrentan el cierre de año y el pago de prestaciones laborales.
"No se busca orientar, se busca intimidar", señalaron empresarios del sector privado, quienes critican que mientras el gasto público carece de transparencia en ciertos rubros, la eficiencia de SEFIPLAN solo se hace notar cuando se trata de fiscalizar y amenazar con multas a quienes sostienen la economía estatal.
El documento oficial insta a los contribuyentes a regularizarse "lo antes posible", dejando un número de teléfono como única vía de asistencia.
Sin embargo, la advertencia es clara: la maquinaria estatal ya tiene a los empresarios en la mira y el incumplimiento no será perdonado, dejando claro que para el Gobierno del Estado, la prioridad es llenar las arcas a costa de la presión tributaria.
