Ce Ce en Veracruz
NOS VAMOS A XALAPA. El próximo viernes 22 de agosto de 2025, el artista gráfico Camilo Cadena presenta su libro THE EMO HANDBOOK; a decir del autor:
"Una guía para cualquier persona interesada en la música emo, narrando a través de ilustraciones su historia y desarrollo desde 1985 hasta la actualidad".
¿Dónde? Calle Hidalgo 67, en la colonia Centro de Xalapa, Veracruz (cerca del parque Los Berros), a las 20:30 horas.
¡Ahí los veo!
GATOS. El club de poesía de la librería ubicada en 20 de Noviembre 436, en la colonia Centro de nuestro hermoso puerto de Veracruz, dedica un ciclo de lectura a estos felinos.
Aunque con una pequeña cooperación, el próximo martes 19 de agosto puedes acudir a las 18:30 horas, para leer y dialogar sobre EL LIBRO DE LOS GATOS SENSATOS DE LA VIEJA ZARIGÜEYA, de Thomas Stearns Eliot.
HISTORIAS DE MAR. Roberto Rosales Martínez nos comparte la 13ª historia que formará parte de las memorias de Alfredo Casarin (sin acento) Padilla. Aquí, el texto íntegro:
"La tormenta. La noche se había adueñado del mar, envolviendo todo en una umbría serena.
El faro, erguido como un centinela solitario en medio de la isla, proyectaba su haz de luz sobre las olas tranquilas.
Pero la calma era un espejismo.
De pronto, un rayo caía del cielo como una espada de fuego, partiendo la oscuridad en dos.
Un visitante inoportuno, un mensajero del caos que nadie había invocado.
Y entonces, el infierno se desataba.
El cielo se convertía en un campo de batalla: relámpagos danzantes, truenos que retumbaban como carcajadas de titanes, lluvia que caía en cortinas espesas, y un viento endemoniado que giraba, cambiando de rumbo en segundos y azotaba las ventanas del faro como si quisiera arrancarlas de cuajo.
Yo, el guardafaros, no me escondía bajo la cama ni me cubría el rostro con la almohada. No.
Luchaba contra la tormenta, buscando desesperadamente tablones de madera para reforzar las grandes ventanas de dos metros y medio.
Cada vez que clavaba una tabla en un lado, el viento la arrancaba del otro, como si una mano invisible se burlara de mis esfuerzos.
Los rayos golpeaban, destellos cegadores se abalanzaban sobre el pararrayos de la torre, descendían hasta la tierra con un rugido eléctrico.
Las nubes, antes dispersas, se unían en una masa oscura y monstruosa que giraban lentamente sobre el faro.
El viento dejaba de ser brisa: se convertía en la respiración de una tormenta que había despertado furiosa.
Miraba desde la oscuridad permitida, momentáneamente iluminada por los relámpagos, cómo el mar se retorcía, herido por las venosas saetas que lanzaba el cielo.
Nunca me sentí totalmente a salvo en todas las tormentas que pasé viviendo en los faros.
La próxima vez que veas una tormenta, piensa en los marinos, en los pescadores… y en mí".
"Alfredo Casarin Padilla vivió 18 años en diversos faros rodeado por el mar. Ahora es un ser terrestre".
No te pierdas la próxima entrega de las historias del Hombre del faro, en La Cartelera de NOTIVER.
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