TENÍA QUE SER
*Y es definitivo
Por LEOPOLDO TLAXALO/NOTIVER
A través de un comunicado extenso que difundieron por medio de sus redes sociales oficiales, la asociación protectora de animales "La Roca", A.C., informó el cierre definitivo del albergue ubicado en Paso del Toro y la suspensión definitiva de todas sus actividades después de 22 años de servicio que inició la fundadora del albergue, la señora Norma Cortina.
En el comunicado informan a la ciudadanía que a partir de este martes 23 de septiembre ya no recibirán más donaciones, ni animales, además se suspenderán todas las actividades que se realizaban para recaudar fondos económicos como el bazar de ropa, el croquetón, el recicán y el perretón.

La decisión se tomó después de que se presentaron situaciones adversas a la asociación protectora de animales como la muerte de doña Norma y la denuncia pública que hizo a través de las redes sociales el alcalde de Medellín, Marcos Isleño Andrade en donde exhibió que los animales estaban en malas condiciones de salud debido a que los tenían abandonados y no recibían atención veterinaria.

Acompañado de la fuerza pública y de integrantes de asociaciones que protegen a los perros y gatos, Isleño habló de la falta de higiene que había en el lugar y de que los caninos y felinos no recibían atención médica veterinaria.
Se dijo que eran 49 animales los rescatados: 38 perros y 11 gatos, algunos en condiciones deplorables.
Otra situación que afectó a los encargados del albergue "La Roca" fue el problema de derecho de paso hacia el albergue de Paso del Toro, problema que se presentó desde hace más de dos años sin que ninguna autoridad hiciera algo al respecto.
A los protectores de animales les bloquearon el paso y fue un problema que nunca se solucionó.
Hasta llegaron a cobrarle dinero a doña Norma Cotrina para dejarla ingresar al albergue de Paso del Toro.
Otro problema que impidió que el albergue siguiera funcionando fue que al morir doña Norma, le heredó su casa amarilla ubicada en la avenida 20 de noviembre a su hija que vive en Estados Unidos, quien nunca se preocupó por continuar el legado de su madre como protectora de animales.
A la hija de Norma sólo le interesa vender la propiedad para tener más dinero en el banco por lo que ya le pidió a su tío, don Sergio, que desaloje el inmueble y le dio de plazo hasta diciembre para hacerlo.
La casa amarilla ya no brindará el servicio de albergue para perros y gatos, ni recibirá apoyos económicos o en especie ni dará en adopción a mascotas pues el albergue cerrará sus puertas definitivamente.
La asociación lamentó que pese a los esfuerzos que se hicieron por encontrar vías legales y administrativas para mantener la operatividad del refugio ya no es posible garantizar su sostenibilidad.
En otro comunicado informaron que como cierre de esta noble causa que por más de 22 años sostuvo doña Norma Cortina, hacen un llamado a albergues y rescatistas de animales para recibir las croquetas restantes que la sociedad veracruzana donó con tanto amor para los peluditos.
