Por Andrés Timoteo
ROBARON A DIARIO
La devastación meteorológica en la zona norte de Veracruz no debe distraer de otras calamidades que se tienen encima.
Unos botones de muestra son los ladrones que aún despachan como presidentes municipales a los cuales el Órgano de Fiscalización Superior (Orfis) acaba de evidenciar en su reporte de la cuenta pública 2024.
Hay alcaldes no paran de robar y que a pesar de que los dictámenes del Orfis les acreditan un daño patrimonial -o sea robo- descarado no han sido ni serán tocados por la justicia dada la protección que les prodigan desde el régimen morenista.
En Fortín de las Flores, por ejemplo, el edil Gerardo Rosales Victoria, allegado al senador Manuel Huerta, lleva tres años robando a manos llenas.
En el 2024 tuvo un daño patrimonial por 7.7 millones de pesos, en el 2023 fue de 2.3 millones y en el 2022 de 1.4 millones.
En total el botín es de 12 millones de pesos o sea que mensualmente se robó 335 mil pesos en los tres años que lleva como munícipe y aún falta auditar este 2'25, el "Año de Hidalgo".
Cerca de ahí, en Ixtaczoquitlán, el edil Nahúm Álvarez Pellico del grupo político que lidera el exsecretario de Educación y actual diputado federal, Zenyazen Escobar -este señor aparecer siempre en todo lodazal- es uno de los ladrones más descocados.
El año pasado tuvo un daño patrimonial de 52.5 millones de pesos, en el 2023 de 73.3 millones y en el 2022 de 5.3 millones.
¡132 millones en tres años!
Y falta el 2025. Rosales se robó 3.6 millones de pesos cada mes a razón de 120 mil pesos diarios.
También hay dos ayuntamientos muy pequeños y en condiciones de pobreza pero cuyas alcaldesas metieron hasta el codo en el cajón de los dineros.
Uno es Mixtla de Altamirano donde gobierna Norma Hernández Sánchez -su hermano Crispín gobernó el trienio pasado como presidente del Concejo Municipal y hurtó incluso más, los Hernández Sánchez llevan regenteando el ayuntamiento desde el 2019- que registra un daño patrimonial en el 2024 por 4.8 millones.
En el 2023 fue de 4.1 y en el 2022 de 10.2 millones.
Vaya, el presupuesto anual de ese municipio es de alrededor de 100 millones, entonces saquen las cuentas de cuánto se robó esta señora que dejó a los indígenas mixtlecos sin obra pública.
Esta alcaldesa hurtó 18 mil pesos diariamente.
En Ixhuatlán de Café hay otro récord en el latrocinio, la edil Angélica Galicia -ya ven que es un mito falso eso de que las mujeres son más honestas que los varones- tiene un daño patrimonial en el 2024 por ¡65.7 millones de pesos cuando todo el presupuesto anual fue de 116 millones!
Es decir, el 56 por ciento -más de la mitad- del dinero que recibió para este año se lo transó.
Su ritmo de hurto fue 180 mil pesos diarios.
El verde Marcos Isleño de Medellín de Bravo es otro que no para de robarse el presupuesto municipal.
El año pasado, el Orfis le detectó un daño patrimonial por 15.1 millones, en el 2023 fueron 65 millones y en el 2022 84.4 millones.
164 millones de pesos en total, a razón de 150 mil pesos por día que se ha robado y falta el 2025.
Los alcaldes referidos son, para no variar, de Morena o aliados del mismo.
Y así, igual de rateros, salieron casi todos los ediles morenistas.
Claro, hay también ediles priistas y panistas que saquearon las tesorerías pero sus botines son mucho menores a los que se llevaron los guindas.
NI LA VIRGEN MARÍA
Y ríanse.
En el reporte del Orfis de la cuenta pública del 2024 hubo alcaldes que salieron más castos que la Virgen María.
Entre ellos Ricardo Ahued que gobierna Jalapa -ojo que no es de ahí sino de Hidalgo-, Carmen Medel de Minatitlán, Juan "El Yona" Gómez de Hueyapan del Ocampo, Héctor Rodríguez Cortés de Camerino Z. Mendoza y Amado Cruz Malpica de Coatzacoalcos.
Ahora resulta que esos ediles cuya fama de saqueadores es épica no se robaron un solo clip el año pasado ni porque es del conocimiento popular que usaron el presupuesto para pagar las campañas electorales de Morena en el 2024.
Estos salieron más puros que la Doncella de Nazareth.
¿Alguien se lo cree?
La muestra de ayuntamientos "sin mácula" confirma que el nahlismo protege a sus allegados y que la titular del Orfis, Delia González, audita y dictamina conforme a intereses partidistas aunque algunos le quemen incienso y la vistan de imparcial.
Pero hay más, dos alcaldes de "oposición" también salieron prístinos y compiten con la Purísima Concepción de María.
Uno, el boqueño Juan de Unanue y, dos, la porteña Patricia Lobeira, ambos de Acción Nacional.
Lo que se mastica en los merenderos políticos es que a sus cuentas les aplicaron el método "Maestro Limpio" por los acuerdos con Morena y el nahlismo.
El mustio Unanue avaló el gasoducto en su municipio promovido por la Secretaría de Energía cuando Rocío Nahle la encabezaba y además operó para el guinda en las elecciones de este año, aunque no le dio para entregarle el ayuntamiento.
A Lobeira en el 2023 le detectaron un daño patrimonial por 23.4 millones de pesos y en el 2024 curiosamente salió inmaculada.
¿La razón?
Sí le cedió la plaza a Morena, pero lo que más le sumó fue su divorcio y distanciamiento con los Yunes, enemigos de la zacatecana.
*Envoyé depuis Paris, France.
