TEXTO IRREVERENTE | NO SON ANÓNIMOS - Verídico, certero y vigente es el concepto acuñado hace cuarenta años por "El Pirrurris" -el personaje que interpretaba el comediante Luis de Alba- de que "no hay naco anónimo"...

Por Andrés Timoteo

NO SON ANÓNIMOS

Verídico, certero y vigente es el concepto acuñado hace cuarenta años por "El Pirrurris" -el personaje que interpretaba el comediante Luis de Alba- de que "no hay naco anónimo".

Al riquillo de ficción lo podrán acusar de todo menos de no ser claridoso.

Es más, a su frase se le puede agregar que en la era 'cuatrotera' tampoco hay corruptos anónimos.

Y en Veracruz se tiene material para una tesis doctoral en "temas ñeros como diría un famoso 'influencer' que crónica a los que llama especímenes del "Serengueti Urbano" -risas, vean su página, es buenísima: 'Geografía Ñera' se llama-.

Son los políticos guindas que se volvieron millonarios en un sexenio y presumen camionetas de lujo, ranchos, mansiones, viajes ostentosos al extranjero y vestuario de diseñador.

Son muy siúticos.

-Por cierto y para los que han preguntado, la palabra siútico está en el diccionario de la Real Academia de la Lengua Española y se refiere a los presumen ser personas finas y elegantes pero sin serlo, solo simulan pero mal.

Es un americanismo desprendido de la palabra inglesa "suit" que significa "traje", específicamente el atuendo elegante para los hombres, pero en la práctica es "naco"-.

El caso más reciente de estos a los que no les gusta el anonimato es el del exsecretario de Educación, Zenyazen Escobar con su ostentación en redes sociales de un rancho ganadero y montando caballos de raza.

Antes, desde que estaba en el gabinete, presumía vehículos y motocicletas caras -que no de lujo ni mucho menos de buen gusto-.

Tras ser 'funado' -vaya palabrita, antes se decía 'ventanear' y criticar-, el ahora diputado federal salió con la maroma de que él siempre ha sido ranchero.

Falso, este señor nació y creció en una colonia popular -y urbana- de Río Blanco, y quienes lo conocen afirman que su única cercanía con lo 'wilderness' o sea lo rural y salvaje es el apodo que adoptó siendo bailarín de 'table-dance': Tarzan Boy -risas-.

Pero no es el único de los cuitlahuistas siúticos y ostentosos.

Ya hizo lo mismo el tabasqueño Carlos Juárez quien fue secretario de Gobierno y que en las redes sociales presumía sus viajes y su rancho "El Veinticinco" con ganado caro y un caballo pura sangre de nombre "Tormenta" que se compró con su modesto sueldo de funcionario.
Ajá.

Y qué decir del excoordinador del congreso local y actual delegado estatal del Bienestar, Juan Gómez, a bordo de camionetas de más de 2 millones de pesos en las que se filma escuchando o cantando música de chunchaca a todo volumen.

Por cierto, este señor cada vez que tiene la oportunidad luce un cinturón con la hebilla Gucci -con el que también apareció enel perfil de la página oficial del congreso local- para que sepan lo que se pone y al parecer es el único que tiene porque siempre saca el mismo cuando quiere de dar el charolazo-.

"No hay naco anónimo", bien decía "El Pirruris".

¿A quiénes hace recordar estos señores? Ah sí, al fidelista Jorge Carvallo que se compró un rancho de lujo en Jilotepec al que llamó "El Azafrán" o al secretario de Seguridad en el duartismo, Arturo Bermúdez con su finca "La Cartuja" por los mismos rumbos.

Ambos con ganado fino y caballos de pura sangre.

O el también duartista-fidelista, Erick Lagos quien al igual que el tuxtleco Gómez fue diputado local, pero además secretario de Gobierno -no como el motejado "El Carón" que por más golpes que costea contra Ricardo Ahued no lo ha podido tirar- con sus camionetas blindadas de alta gama.

Moraleja uno: los nacos no son nuevos en la fauna política local.

Se creía que la 'naquiza' había sido el sello del sexenio fidelista, pero los cuitlahuistas lo están superando y a diario salen más siúticos colados, ahora, en el nahlismo.

Moraleja dos: a ellos los podrán criticar por corrientes, pero nadan en billetes -aunque sean robados-.

Moraleja tres: de los de la mansión de El Dorado ya ni hablemos.

KÉTCHUP O VALENTINA

Otro folclórico cuitlahuista nada discreto que se jacta en las redes sociales de sus vacaciones en España con 'selfies' y fotografías en lugares icónicos, entre ellos el estadio Santiago Bernabeu en Madrid, es Eleazar Guerrero Barrera.

Este individuo fue administrativo de la Secretaría de Seguridad y es hijo de Eleazar Guerrero Pérez, exsubsecretario de Finanzas y uno de los pillos más voraces del cuitlahuato.

Guerrero Pérez es primo de Cuitláhuac García y por ende, Eleazar hijo es su sobrino.

Ahora se pasea por Europa con el respectivo alarde digital para demostrar que puede.

Algunos de larga data en la comunidad mexicana de España se divierten con los turistas del terruño que llegan y lo primero que piden es conocer la cancha donde juega el Real Madrid.

Es algo legítimo, la emoción de visitar un lugar famoso, se les aclaró en su momento.

"Sí, pero no fotografiarse y 'selfiarse' hasta el hartazgo para presumir que estuvieron aquí, eso es tan naco como ponerle (salsa) kétchup -catpsu- o Valentina a la tortilla -la española, claro-", respondieron.

Ni como desmentirlos.

Bueno, el caso es que el siútico Eleazar hijo anda gastándose en España lo robado...

digo lo ganado en el sexenio anterior.

Risas madrileñas.

*Envoyé depuis Paris, France.