Por Andrés Timoteo
IMPUNIDAD VALIENTE
Ver a la 'moreniza' arropar en su consejo nacional al exgobernador de Tabasco y actual coordinador del Senado, Adán Augusto López pese a que su exsecretario de Seguridad Pública en aquella entidad, Hernán Bermúdez, anda huyendo porque durante años lideró un cartel local del narcotráfico es el resumen cómico-trágico de ese partido político.
Los que durante años denunciaron la existencia de la "mafia del poder" y decían que el expresidente panista Felipe Calderón y su secretario de Seguridad, Genaro García Luna, hoy preso en Estados Unidos por narcotráfico, eran la personificación de la dupla gobierno-crimen organizado, ahora cierran filas en torno a otro político delincuente.
Cuando gobernaba Tabasco, López Hernández puso a Bermúdez al frente de la Seguridad a sabiendas de sus nexos con el Cartel J al que respondía "La Barredora", el grupo local que él comandaba.
López lo permitió porque también era cómplice.
Los gritones guindas de ayer, hoy vuelven a gritar pero ya no acusaciones ni exigencias de cárcel para los criminales sino que corean:
"¡No estás solo!" como lo hicieron el fin de semana para Adán Augusto López durante el consejo nacional de Morena.
La charada esa de "honestidad valiente" terminó en "impunidad valiente" porque se necesita tener valor y demasiada caradura para defender en público a un personaje tan indefendible e impresentable.
Ah y en lo cómico del asunto está la confusión de algunos ilusos que se emocionaron cuando comenzaron a escuchar que Bermúdez, el exsecretario estatal de Seguridad Pública, salió corriendo porque lo iban a detener por sus nexos con el crimen organizado.
¡Pensaban que era Arturo Bermúdez quien ocupó ese mismo cargo pero en Veracruz bajo el gobierno de Javier Duarte!
Risas.
Pero el Bermúdez veracruzano anda libre y tranquilo.
Lo liberó el Cuitláhuac García, nadie lo olvide, y hasta el presente sexenio sigue bendecido por la "impunidad valiente".
TONTÍN Y TARZÁN
Hablando del exjefe de Bermúdez Zurita, a Javier Duarte nadie le puede regatear su ingenio para los sobrenombres.
Fue quien bautizó a la zacatecana Rocío Nahle como la "Tía Chío" desde la campaña electoral del 2025 y ahora dio otro campanazo al referirse como "Tontín" para aludir al pozarricense José Lima, el secretario de Finanzas en el cuitlahuismo.
¡Y le quedó que ni mandado a hacer!
Claro, ese mote es por uno de los siete enanos en el cuento de Blancanieves de Jacob y Wilhelm Grimm quienes lo escribieron hace más de dos siglos, en 1812-.
Lima no solo tiene parecido físico con el personaje que ilustraron en 1937 para la película animada de Walt Disney sino que Duarte le aplicó su dosis de insidia al sugerir que es parte de los 'enanos' -cortos políticamente, y de ideas y hasta de mañas- del morenismo aldeano.
Su dardo venenoso fue para "Tontín" Lima y otro 'enano' como Zenyazen Escobar, el exsecretario de Educación, a quien cita como "Tarzán" aunque ese apodo no lo inventó Duarte quien solo retomó el nombre de batalla 'strippera' con el que el rioblanquense se identificada en su etapa de bailarín de 'chippendale': Tarzan Boy.
De "Tontín" y "Tarzán" -vaya hasta concuerdan en letras iniciales, número de sílabas y acento tónico- se burla por el mamotreto que hicieron con la reconstrucción del estadio Luis "El Pirata" de la Fuente en Boca del Río con el cual provocaron un desfalco de más de mil 600 millones de pesos al erario.
Obvio, para ellos no fue un yerro sino un negocio.
"Tarzán" se enojó y se enfrascó en una batalla digital contra Duarte pero desde el inicio la tuvo perdida pues el exgobernador -como toda la opinión pública- está al tanto del cochinero en la obra y de la confesión de parte que hizo sobre que él y "Tontín" Lima eran cómplices -lo dijo así, con todas sus letras- en dicha transa.
LES PISA LA SOMBRA
Además, si alguien sabe de obras fraudulentas es Duarte.
Es un docto en la materia a pesar de que él alegue no estar acusado judicialmente de ningún desfalco financiero y haya afirmado que si alguno de sus exfuncionarios robó él no estaba enterado y abusaron de su confianza.
Ajá.
Pero aceptando sin conceder, dirían los abogados, se ve que Duarte tiene buen ojo para juzgar y emitir peritajes sobre la corrupción en las obras públicas.
Y también sabe de los enjuagues en finanzas pues recuerden que fue titular de Sefiplan durante la fidelidad.
Si "Tontín" Lima le quisiera corregir la plana pues lo agarraría de trapeador de pisos.
Además, los 'cuatroteístas' aldeanos, y especialmente los cuitlahuistas, no tienen cara para recriminarle sus expresiones pues siempre se ha dicho que el exgobernante financió buena parte de la campaña electoral de Cuitláhuac García para que llegara a palacio de gobierno.
Y con él llegaron Escobar y Lima, los aludidos.
Un indicio visible de lo anterior es que en el 2018 García Jiménez recorrió la entidad a bordo de camionetas de lujo presuntamente propiedad de un personaje muy allegado al exgobernador ya que la movilidad terrestre fue parte del subsidio prodigado.
Ergo y sintetizando: Duarte tiene bien medidos a todos ellos y les pisa la sombra.
*Envoyé depuis Paris, France.
