
Por Andrés Timoteo
¿HOSPITAL POTEMKIN?
Cuentan en el sur de Veracruz que el cacareado Hospital Materno-Infantil de Coatzacoalcos, inaugurado el fin de semana por la presidenta Claudia Sheinbaum, está fuera de servicio.
Es decir, no reciben ni atiende a pacientes ni está equipado ni tiene el personal médico requerido para su funcionamiento.
¿En serio? Entonces, la mandataria inauguró un cascarón.
Es lo que se dice.
El dato también ya trascendió en un par de medios informativos y por ahí le agregaron que el poco equipo con el que lo avituallaron fue llevado de otros nosocomios para crear la decoración 'ad hoc' a fin de que Sheinbaum posara para la fotografía y se forrara el boletín respectivo.
¿Tanto así?
No sería la primera vez que los funcionarios de Morena inauguran obras inacabadas o les coloquen equipos ajenos que luego retiran en silencio.
Acuérdense en mayo del 2024 acarrearon tanques con gasolina llevada de otros complejos para que la zacatecana Rocío Nahle, siendo secretaria de Energía, simulara que la refinería de Dos Bocas ya estaba produciendo combustible.
¿Ahora repitió el truco con el hospital?
También acaba de suceder algo similar en la Torre Pediátrica de Veracruz donde por presión de los padres de niños con cáncer colocaron 15 aparatos móviles de aire acondicionado a finales de junio.
Pero no duraron mucho pues el personal de la Secretaría de Salud los retiró a inicios de julio para llevárselos a otras unidades médicas y calmar las protestas de allá, pero dichos equipos ni siquiera fueron adquiridos con el presupuesto público sino que eran donaciones conseguidas por los mismos familiares.
¡Estos guindas se roban todo!
A la que le atribuyen el hurto de los 'climas' es Marcela del Grissel Yáñez Tapia, la administradora del Hospital Regional de Alta Especialidad -risas- de Veracruz, al que está anexada la Torre Pediátrica.
Yáñez es herencia cuitlahuista y concretamente de uno de los hermanos del exgobernante que es neumólogo y durante seis años puso y quitó directivos en dicho hospital, los cuales también le reportaban jugosos negocios.
Pero regresando al tema, de ser cierta la versión del sur, entonces Sheinbaum y Nahle volvieron a las andadas con eso de los Pueblos Potemkin -en este caso Clínicas Potemkin- para engañar al pueblo.
Ya se ha explicado el origen histórico de ese concepto.
Cuando en Rusia gobernaba Catalina La Grande un mariscal suyo, Grigori Potemkin, le organizaba recorridos sobre el río Dniéper para que viera y saludara a las "prósperas" aldeas asentadas a sus orillas, pero que en realidad eran pueblos de utilería con actores que simulaban ser felices lugareños.
Y una vez que la embarcación real pasaba de largo inmediatamente desmontaban la falsa aldea y se llevaban la utilería y los actores hasta el siguiente "pueblo" que vería la emperatriz
¿En Coatzacoalcos sucedió así?, ¿Es un hospital Potemkin?
No se sabe -aún- pero se sospecha y es lo que la gente cuenta.
CHANZA POR CHANZA
Hace un mes la presidenta Sheinbaum puso en marcha el programa "Salud casa por casa" al que ya muchos toman a guasa porque es sabido cómo terminan este tipo de emprendimientos de la "cuarta transformación".
Es más, lo refieren como "Chanza por chanza" pues nadie cree que en realidad su objetivo sea atender y aliviar los padecimientos de la gente.
Suena parecido a la estafa que llamaron Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi) con la que el tabasqueño Andrés Manuel López Obrador engañó que acabaría la corrupción en el sector salud, que se estaba garantizado el abasto de médicos y medicamentos, y que México contaría de un sistema sanitario como el de Dinamarca.
Fue un fracaso total y costuras similares se le ven a "Chanza por chanza".
Es más, los rumores lo atiborran: que es una estrategia electorera y que los que no comprometan el voto por Morena los dejaran a su suerte con su enfermedad o que la mayoría de los 20 mil "facilitadores" son médicos cubanos, esos esclavos modernos que la dictadura castrista le alquila al gobierno mexicano.
Las preguntas sobre el mismo tampoco son ociosas.
¿Los "facilitadores" cargarán un botiquín surtido o solo repartirán aspirinas e ibuprofeno?
¿Cómo le hará el paciente si le recetan un medicamento que no traen consigo ni lo tienen las farmacias del gobierno?
¿En Veracruz los acompañarán las "Camionetitas de la Salud" de la zacatecana Nahle?
Solo con plantear -ya no se diga responder- esas tres preguntas se puede llegar a la conclusión de que el citado programa apunta para ser otra tomadura de pelo como el Insabi y la Mega-Farmacia del Bienestar, ¿no creen?
LOS ESPECTROS
A propósito, ¿cuántas manifestaciones callejeras van en este sexenio de padres de niños con cáncer por el desabasto de medicamentos oncológicos en el Cecan y otros nosocomios de la entidad?
Son siete desde diciembre a la fecha, la última fue el 26 de junio.
Vaya, casi una por mes en los ocho que lleva Nahle al frente del gobierno estatal.
¿Y sus 'camionetitas' repartidoras de medicinas?
¿Y su secretario Valentín Herrera?
Ambos son como los espectros de las leyendas urbanas -se insiste- pues se cuenta que existen, pero nadie los ha visto.
*Envoyé depuis Paris, France.