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¿Podría haber algo mas surrealista que la desaparición de dos almacenes completos? Vaya, eso solo pasa en Veracruz. Según el exsecretario estatal de Desarrollo Agropecuario, Evaristo Ovando, el gobierno veracruzano poseía...

Por Andrés Timoteo

DESAPARICIONES

¿Podría haber algo mas surrealista que la desaparición de dos almacenes completos?

Vaya, eso sólo pasa en Veracruz.

Según el exsecretario estatal de Desarrollo Agropecuario, Evaristo Ovando, el gobierno veracruzano poseía cuatro bodegas en la Central de Abastos de la Ciudad de México, pero ahora sólo tiene dos.

La gobernante en turno, Rocío Nahle confirmó lo anterior al tiempo de asegurar que las dos bodegas restantes ya fueron "recuperadas".

Pero, ¿quién se hace desaparecer dos locales -físicos-?

Tal vez sea un error lexicológico del exfuncionario, pero el trasfondo es igual de inverosímil.

Alguien se robó ese par de bodegas valuadas en varios millones de pesos y no se hizo nada.

¿Fue en el sexenio yunista o el duartista, en la fidelidad o en el alemanato?

Nadie sabe, nadie supo.

Los locales se hicieron humo y ni por error se investiga quiénes fueron los responsable.

También es increíble que todavía no esté preso el subsecretario de Ganadería y Pesca del gobierno cuitlahuista, Humberto Amador Zaragoza, porque durante seis años manejó las dos bodegas restantes como si fueran de su propiedad.

Según investigaciones periodísticas, ambos rentaba a terceros ambos locales identificados con los numerales U-37 y U-39 a través de su hermana, María Elida Amador a 120 mil pesos mensuales.

Nadie dijo nada, nadie investigó nada ni en el sexenio anterior ni en el presente hasta que Humberto Amador lanzó críticas a la política ganadera del nahlismo por los brotes del gusano barrenador.

O sea, por cuestionar al esposo de la mandataria que está encargado del tema.

Esas críticas las hizo en agosto y un mes después ya le habían quitado las bodegas.

¿Hubieran hecho lo mismo si el exfuncionario no hubiese cuestionado al 'primer damo'?

Para nada, ahí siguiera haciendo negocio con el patrimonio estatal.

Pero esas no son las únicas desapariciones delirantes en Veracruz, hay otras.

Por ejemplo, en mayo del 2019 el gobierno cuitlahuista rentó 110 vehículos automotores para habilitarlos como patrullas policíacas.

Fue un negocio redondo.

Por cada unidad se pagó un alquiler de un millón 531 mil pesos, lo que representa el doble del precio si se hubiesen comprado pues salían en 780 mil pesos.

Y la empresa beneficiada era de un político priista del Estado de México que hizo transas durante el peñismo y ahora en el obradorismo.

LAS PATRULLAS DE ADÁN

Se trata de Luis Humberto Montaño García, propietario de Lumo Financiera del Centro, S.A., la arrendataria de las 110 patrullas de las cuales no se sabe nada, si ya las devolvieron o renovaron el contrato de alquiler que se venció en el 2023.

¿De cuánto fue el 'moche' que se llevó el exgobernador Cuitláhuac García por ese chanchullo?

Nadie sabe, nadie supo.

Y esas patrullas ahora están desaparecidas.

A esta estafa bien podría sacarle provecho político la zacatecana Nahle, no contra García Jiménez sino contra el personaje que recomendó al empresario para hacer el negociazo y que sería su socio: el tabasqueño y actual senador Adán Augusto López Hernández.

Montaño es protegido y presunto socio de López Hernández a través de cuya influencia obtuvo contratos por 8 mil millones de pesos para Lumo Financiera del Centro y su otra firma, Lease & Fleet Solutions, de la CFE, la Secretaría de Gobernación, la Lotería Nacional y el IMSS durante el sexenio lopezobradorista.

Todos por la renta de vehículos, según un reportaje de LatinUS el pasado mes de junio.

Ya en el gobierno de Claudia Sheinbaum, el ISSSTE le otorgó un contrato por 13 millones de pesos a cambio del alquiler de ambulancias.

Además, actualmente Montaño es coordinador de asesores del Instituto Belisario Domínguez del Senado donde cobra como si fuera un senador, más de 120 mil pesos mensuales.

López Hernández tiene bien tratado en la nómina legislativa a su supuesto socio.

El otro empresario muy cercano y supuesto socio de López es el veracruzano Fernando Padilla, para el cual el trato es similar al de Montaño aunque no lo metió a la nómina pública-.

Entonces, esas 110 patrullas rentadas en el sexenio pasado en realidad eran del actual coordinador senatorial.

¿Por qué Nahle no jala la madeja con una investigación local para 'arrimarle el caballo' al tabasqueño que tanto la ha fastidiado con intrigas políticas?

¿Y LOS 658 MILLONES?

Simple, no le conviene estirar ese hilo ya que Montaño también recibió contratos millonarios en la refinería de Dos Bocas.

Cobra unos 400 millones de pesos anuales por rentar vehículos al recinto portuario del complejo.

Y la duración de los contratos es hasta el 2026 pues así lo dejó amarrado la zacatecana junto con el exsecretario de Marina Rafael Ojeda.

Finalmente sobre las desapariciones inexplicables tampoco hay que olvidar los 300 millones de pesos que Cuitláhuac García dijo que le quitó al exfiscal yunista Jorge Winckler y los otros 358 millones que invirtió en el fraudulento Accendo Banco y aparentemente nunca fueron recuperados.

¿Dónde quedaron esos 658 millones?

Nadie sabe, nadie supo.

Oficialmente están desaparecidos, pero es casi seguro que terminaron en las cuentas bancarias de los exfuncionarios estatales.

Envoyé depuis Paris, France.