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TEXTO IRREVERENTE | BALLET EN EL CIELO - De repente, una nube centelleante destapó a la 'Dame de Fer'. Así fue el debut anoche de la Torre Eiffel en el 236 aniversario del inicio de la Revolución Francesa. Por vez primera, la tecnología electrónica...

De repente, una nube centelleante destapó a la 'Dame de Fer'. Así fue el debut anoche de la Torre Eiffel en el 236 aniversario del inicio de la Revolución Francesa. Por vez primera, la tecnología electrónica iluminativa de avanzada hizo comparsa...

Por Andrés Timoteo

BALLET EN EL CIELO

De repente, una nube centelleante destapó a la 'Dame de Fer'.

Así fue el debut anoche de la Torre Eiffel en el 236 aniversario del inicio de la Revolución Francesa.

Por vez primera, la tecnología electrónica iluminativa de avanzada hizo comparsa con la pólvora encendida para vestir al mítico monumento francés.

Sobre los cielos parisinos hubo un ballet de mil drones refulgentes.

Por supuesto, la Inteligencia Artificial (IA) hizo también su debut para engalanar los 312 metros de la Dama de Hierro que tras develarla inmediatamente formó una enorme y multicolor 'colombe de la paix' (paloma de la paz).

Y mientras esa ave volaba, al centro de la estructura metálica se recreó el gorro frigio, el símbolo histórico de la libertad en Francia.

Después vinieron otras figuras hazañosas: ahora unos espirales, ahora unos bucles, ahora las flores de lis -emblemas de la antigua monarquía gala-.

Luego la danza de animales, desde peces, elefantes y lagartos hasta serpientes, jirafas, gatos y ballenas.

Tras eso, un enorme 'foulard' -estola- se desplegó para simular una aurora boreal que nunca se ve por estas latitudes, únicamente en los países nórdicos, pero la magia de la IA la hizo posible.

Y esta precedió al perfil de Marianne, la encarnación de la patria, frente al de una mujer actual que iba cambiando de rasgos conforme a la música, de caucásica a latina y de oriental a africana.

Las imágenes 'dronísticas' más bellas fueron un par de bailarines de música moderna, electrónica se deduce por sus movimientos, sobre una pista recta que parecía derretirse, y los mini-clones de la propia Torre Eiffel que giraban sobres sus ejes y envolvieron a la mayor para después disolverse en un gigantesco corazón.

El espectáculo cerró con el lema de la república desde hace más de dos siglos:

"Liberté, Égalité, Fraternité" ("Libertad, Igualdad, Fraternidad").

¿Sabían que su creador fue un periodista?

Es Camille Desmoulins que también fue abogado y político, y que la difundió en 1790, al año siguiente de la Toma de la Bastilla.

Desmoulins acompañó el levantamiento armado contra la monarquía, pero murió guillotinado en 1994 luego de oponerse y denunciar el desvío de los ideales revolucionarios con la instauración de "La Terreur" ("El Terror"), el periodo de persecución y ajusticiamiento de los críticos que impulsó Maximiliano Robespierre quién era su amigo y aún así lo sentenció a muerte.

A Demmoulins lo han llamado el "Primer Apóstol de la Libertad".

Por supuesto y conforme a la idiosincrasia francesa, el uso de drones que, por momentos, anoche acapararon la atención pues se tuvo que oscurecer a la misma Torre Eiffel a fin de que resplandecieran las luces 'leds', enseguida abrió el debate sobre la minimización del monumento más conocido y emblemático de Francia.

Y ese debate va a durar mucho tiempo porque la IA llegó para quedarse.

BACHIANAS BRASILEIRAS

Antes del espectáculo de fuegos artificiales se realizó el Concierto de París por la Orquesta Nacional de Francia dirigida por Cristian Mäcelau que este año tuvo como país invitado a Brasil y por eso sobre el Campo Marte se escucharon las hermosas 'bachianas brasileiras', novenas operísticas de Heitor Villa-Lobos inspiradas en la obra de Johann Sebastian Bach.

El tenor invitado fue el paulista Bruno de Sá.

Otras figuras del Concierto de París fueron las sopranos Aida Garifulina, rusa, Elīna Garanča, letona, y la francesa Julie Fuchs.

Igualmente la contrabajista Lorraine Campet, el violonchelista Gautier Capuçon y el pianista Alexandre Kantorow, lo tres galos, y el tenor inglés Benjamin Bernheim.

En el desfile militar sobre Les Champs-Élysées, celebrado por la mañana, Indonesia fue la nación invitada por los 200 años de relaciones diplomáticas con Francia.

Y a diferencia de otros años, esta vez no solo se exhibió a siete mil militares marchando a pie, sobre tanques, aviones o caballos sino también se paseó armamento bélico desde misiles hasta artilleros Caesar.

El músculo castrense mostrado se dio, obviamente, en el contexto del auge bélico e inestabilidad política en el orbe -las guerras Rusia-Ucrania e Israel-Palestina-Irak- y las embestidas del norteamericano Donald Trump contra la OTAN y sus países miembros, europeos la mayoría.

"Desde 1945, Francia y Europa no se veían tan amenazadas como ahora", dicen los analistas.

CATEDRAL PLUSMARQUISTA

El rectorado de la Catedral de Notre-Dame de París informó la cifra récord de visitantes lograda en sus primeros seis meses tras ser reabierta en diciembre del 2024: 6 millones, a razón de un millón por mes y 35 mil por día.

Y la tendencia es que romperá las marcas históricas al finalizar este 2025 con más de 12 millones de asistentes.

De lograrlo se ubicará como el monumento más visitado del continente europeo superando a la Basílica de San Pedro, en el Vaticano, que ocupa el primer lugar con 10 millones, a la misma Torre Eiffel que está en el segundo con 7 millones y al Coliseo Romano que tiene el tercero con 6.5 millones.

En Notre-Dame se cumple eso de que la resurrección y el esplendor vienen del fuego pues la catedral parisina se quemó en el 2019.

*Envoyé depuis Paris, France.