
Por: Edgar Ochoa/ NOTIVER
Serie de las Américas a la vista
Caracas no se quedó mirando el juego desde las gradas.
Tras quedar fuera como sede de la Serie del Caribe 2026, la LVBP movió el bullpen y anunció un torneo alternativo en la capital, en las mismas fechas, con la Serie de las Américas como excusa perfecta para que la pelota internacional no nos pase de largo.
Vendrán los campeones de Colombia, Curazao, Nicaragua y Argentina, mientras Panamá y Cuba lo harán con selecciones nacionales, en un menú que promete sabor regional y buen nivel competitivo.
La decisión, más allá del ruido político-deportivo que generó la exclusión, apunta a algo simple: mantener viva la llama del béisbol caribeño en Venezuela y aprovechar la infraestructura, la tradición y el público caraqueño.
No es un reemplazo, es una respuesta.
Un recordatorio de que aquí el béisbol no se suspende, se reinventa, y que cuando la pelota no te invita a la fiesta, tú armas la parranda en casa.
Por la gloria
Bryce Harper vuelve a ponerse la camiseta de su país y la noticia cae como jonrón a la pradera central porque no es cualquier jugador ni cualquier momento.
A los 33 años, con 27 cuadrangulares y un OPS de .844 en la última temporada, el cañonero de los Filis anunció su intención de integrar el roster de Estados Unidos para el Clásico Mundial 2026, reviviendo aquel orgullo que sintió a los 15 cuando ganó oro con las selecciones juveniles.
Harper ya había dicho que sí en 2023, pero el codo operado le cerró la puerta y dejó a Estados Unidos viendo cómo Japón levantaba el trofeo otra vez.
Ahora el panorama es distinto y el equipo pinta de lujo con Aaron Judge, Kyle Schwarber, Tarik Skubal y Paul Skenes como socios de peso.
Aunque USA Baseball aún no lo ha hecho oficial, el mensaje está claro y cargado de emoción patriótica.
Estados Unidos arrancará en Houston ante Brasil el 6 de marzo y Harper quiere estar ahí, porque hay cosas que el tiempo no borra.
Jugar por tu país es una de ellas.
Felices fiestas
En esta época donde el calendario se llena de luces y recuerdos, quiero detener la pluma y el juego un momento para decir gracias.
Gracias a cada lector que día a día se toma el tiempo de leer estas líneas y compartir esta pasión que nos une.
Gracias por acompañar, debatir, coincidir o discrepar, porque todo eso también es béisbol.
Que la Navidad llegue con salud, esperanza y buenos innings para todos.
Que no falte el abrazo sincero ni la conversación alrededor de una mesa.
Seguiremos contando historias, celebrando triunfos y aprendiendo de las derrotas.
Porque mientras haya pelota y lectores, siempre habrá una historia que contar.
¡Feliz Navidad!