Por: Edgar Ochoa/ NOTIVER
Confirmado
La Navidad le cayó con guante y pelota nueva a la nación beisbolera mexicana, porque se confirmó que Jarren Duran volverá a portar la franela tricolor en el Clásico Mundial de Beisbol 2026.
La Comisión de Selecciones Nacionales, integrada por FEMEBE, LMB y la gerencia encabezada por Rodrigo López, soltó la noticia como batazo de hit al central.
Durán vivirá su segunda aventura mundialista tras aquella histórica gesta de 2023.
Ese torneo nos hizo soñar despiertos con un tercer lugar que supo a gloria.
A partir de ahí, Jarren no sólo creció como jugador, también como figura del beisbol mexicano.
En 2024 fue All Star con Boston y hasta se llevó el MVP del Juego de Estrellas.
Todo su camino profesional ha sido con los Medias Rojas.
En 2023 bateó para .295 y dejó claro su talento con el bat.
En 2024 sacó 21 pelotas del parque.
En 2025 produjo 84 carreras y confirmó su madurez para ser titular.
Desde la NCAA con Long Beach State hasta debutar en MLB en 2021, su historia es de constancia.
Hoy México le abre de nuevo la puerta.
Bienvenido a casa, Jarren.
Jakemate lo logra
En Mexicali se vivió una noche de esas que se cuentan con voz bajita y piel de gallina, porque Jake Sánchez empató un récord histórico en la LAMP.
Los Águilas vencieron 1-0 a Tucson con una blanqueada que fue una joya colectiva.
Ernesto Zaragoza abrió el camino con cinco entradas impecables.
Kurt Heyer mantuvo el orden.
Y entonces apareció Jake, con la calma de los grandes.
Retiró la entrada en riguroso orden y aseguró el triunfo.
Con ese salvamento llegó a 134 en su carrera.
Así empató la marca del “Dr. Suspenso”, Isidro Márquez.
No es cualquier cosa ponerse a la par de una leyenda.
Mexicali lidera ya las blanqueadas de la temporada.
Y Sánchez sigue escribiendo historia a base de nervio frío.
Luto en el beisbol veracruzano
El beisbol veracruzano está de luto tras el fallecimiento de Fernando Reyes Zamudio.
Se fue un hombre hecho en el diamante y en la vida.
Egresado de la Liga Beto Ávila, siempre llevó el beisbol en la sangre.
Fue parte entrañable de la familia del beisbol y del softbol.
También dejó huella en la Liga de Playa de Vacas.
Su presencia fue constante y sincera, siempre jugó intensamente.
El gremio petrolero también lo recuerda con respeto.
Hoy el terreno se siente más vacío sin él.
Duele su partida, porque se va un amigo del juego.
A su familia, pronta resignación y abrazo solidario.
Descanse en paz.
