Los Texans amarraron su boleto a la Postemporada.
Con todo y que C.J. Stroud sufrió dos intercepciones, la defensa de Houston jugó a su nivel -es la mejor de la Liga- para vencer 20-16 al equipo angelino.
Los Texans, que ligaron su octava victoria, dejaron su marca en 11-5 y todavía aspiran por el título del Sur de la AFC, esperando lo que haga Jacksonville este domingo ante Indianápolis, equipo que con la victoria de Houston quedó eliminado de Playoffs.
Del otro lado, la derrota fue dura para los californianos, que vio rota una racha de cuatro triunfos, además de que se esfumó el chance de quedarse con el Oeste de la Americana y de soñar con la mejor siembra de la Conferencia.
Tras irse al medio tiempo con una ventaja de 14-3, los Texans sufrieron de más en la segunda mitad.
Justin Herbert acabó con 236 yardas, un pase de touchdown y una intercepción.
Los locales intentaron emparejar las acciones y se acercaron 20-16 con 3:37 por jugarse.
El pateador Cameron Dicker falló un punto extra y un gol de campo, cuatro puntos claves y la diferencia por la cual los Chargers perdieron.
El ataque terrestre de Los Ángeles no encontró la forma de hacerle daño a una férrea defensa de Houston, que sólo permitió 74 yardas por esa vía.
Los Texans son el equipo más enrachado en la NFL y su temible defensiva los podría llevar lejos en la Postemporada, instancia que han alcanzado en las tres temporadas de Stroud como quarterback titular.
